Mito Vs. Realidad
Vamos a comenzar con una pregunta más fundamental: ¿Qué distingue el mito de la realidad? ¿Cómo sabemos, por ejemplo, que Alejandro Magno existió realmente? Supuestamente, en el año 336 aC, Alejandro Magno se convirtió en rey de Macedonia a los 20 años de edad. Un genio militar, éste apuesto y arrogante líder masacro a través de su camino aldeas, ciudades, y reinos del mundo Greco-Persa hasta que él los gobernó todos. En breves ocho años el ejército de Alejandro había atravesado un total de 22,000 millas en sus conquistas.
Se ha dicho de Alejandro que el lloró cuando se quedó sin mundos por conquistar. (Estoy pensando, esta no es la persona con quien quiero jugar monopolio.)
Antes de que el muriera a la edad de 32 años, Alejandro según se informa, logró el más grande acto militar que ninguno otro la historia, no sólo de los reyes que habían vivido antes de él, pero también de esos que estaban por venir más tarde, hasta a nuestro propio tiempo. Pero hoy, con excepción de un puñado de ciudades llamadas Alejandría, una película aburrida de Oliver Stone, y unos cuantos libros, su legado quedó en el olvido. De hecho, el nombre de Colin Farrell tiene más poder de atracción en la taquilla que el de Alejandro.
A pesar del fracaso de taquilla, los historiadores creen que Alejandro existió debido a tres razones principales:
- Documentación escrita desde principios de los historiadores
- Impacto histórico
- Otras evidencias históricas y arqueológicas
Documentos Históricos Sobre Jesús
Lo histórico de Alejandro Magno y sus conquistas militares se extrae de cinco fuentes antiguas, ninguna de las cuales fueron escritas por testigos presenciales. Aunque escrito 400 años después de Alejandro, La Vida de Alejandro de Plutarco es el primer relato de su vida.
Desde Plutarco y los otros escritores hubo varios cientos de años alejados de los acontecimientos de la vida de Alejandro, ellos basan su información en relatos anteriores. De los veinte relatos históricos contemporáneos de Alejandro, ninguno sobrevive. Más tarde existieron relatos, pero cada uno presenta un “Alejandro” diferente, lo que deja mucho a nuestra imaginación. Pero a pesar de la diferencia de tiempo de varios cientos de años, los historiadores están convencidos de que Alejandro fue un hombre real y que los detalles esenciales de lo que nosotros leemos acerca de su vida son verdades.
Dejando a Alejandro como un punto de referencia, nosotros notaremos que para Jesús hay ambos relatos históricos religiosos y seculares. Pero debemos hacer la pregunta, ¿fueron escritos por historiadores fiables y objetivos? Echemos una breve mirada.
Haga clic aquí para continuar leyendo la página 4 de 10 de ¿Era Jesús una persona real?